¿CÓMO ELEGIR LA TALLA DE ZAPATOS DE TU BEBÉ?
Tu bebé está creciendo... Y aún no has tenido tiempo de nada que ya tienes que buscar un nuevo par de zapatos para proteger sus diminutos pies. Una tarea que no siempre es sencilla, y más cuando se trata de tu primer hijo.
¿Por qué hay que medir los pies del bebé?
Aunque la mayoría de las marcas de zapatos de bebé recomiendan elegir la talla del zapato en función de la edad del niño, ¡no es una ciencia exacta! La talla recomendada es orientativa, por lo que es imprescindible medir regularmente los pies de tu bebé.
Cada niño se desarrolla a su ritmo, y no todos los bebés tienen los mismos pies: anchos, finos, gorditos... En Robeez, te aconsejamos que elijas primero según el tamaño de los pies de tu bebé, aunque la edad sea un primer indicio. De este modo, podrás adaptarte mejor a los pies de tu bebé, que irán cambiando y desarrollándose con el paso de los meses.
¿Cuándo debo cambiar los zapatos de mi bebé?
Entre los 2 y los 4 años, el pie de tu bebé es muy maleable y flexible. Los músculos y el arco del pie se están formando y el pie se va afinando hasta parecerse a un pie adulto.
En el caso de los más pequeños, es aconsejable medir los pies cada dos o tres meses y luego ajustar la talla de los patucos en consecuencia. Durante los tres primeros años, los patucos o zapatos deben renovarse una media de cuatro veces. A partir de los tres años, deberían cambiarse aproximadamente dos veces al año, es decir, cada seis meses.
La mejor manera de saber si los zapatos de tu bebé todavía le quedan bien es observar su comportamiento. Aunque no sepa aún expresarse con claridad, ¡ya se encargará de hacértelo saber!
¿Cómo saber si los zapatos le quedan bien?
Si los zapatos son demasiado pequeños, primero intentará quitárselos por todos los medios y, sobre todo, ¡se enfadará cuando intentes ponérselos! En cualquier caso, te costará ponerle los zapatos y tendrás la sensación de que se los estás poniendo a la fuerza.
Con unos patucos o zapatos demasiado pequeños, tu bebé enroscará los dedos de los pies, lo que se notará en su forma de andar: empezará arrastrando los pies, y verás que no podrá desenrollarlos tan bien. También tenderá a caminar de puntillas. Tu bebé adapta su forma de andar de forma instintiva, y si hay algo que le molesta, es poco probable que no te des cuenta.
Los patucos o zapatos de bebé deben estar adaptados para aprender a caminar. Es un periodo en el que el bebé está descubriendo toda una serie de formas de moverse, y sus pies además de estar protegidos, deben poder desarrollarse de forma natural. Por este motivo, desaconsejamos los zapatos de segunda mano, que ya que se han desgastado y adaptado a la morfología del bebé que los ha llevado.
¿Cómo medir correctamente los pies?
Imprimir el pédimetro
En primer lugar, debes imprimir el pédimetro de pies a escala real. Coloca el pie de tu hijo/a sobre el medidor en la posición indicada. El talón debe estar perfectamente alineado con la línea de inicio.
Posicionar a tu hijo/a
Es esencial que tu peque esté de pie y que sus dedos estén completamente extendidos. Puede haber hasta una talla de diferencia si no se extienden bien los deditos.
Trazar la forma del pie
Cuando el pie esté perfectamente posicionado, traza con un lápiz la circunferencia de la punta del pie, manteniendo los dedos bien extendidos.
Resultado
Determina que talla corresponde a la línea que trazaste antes. Sé muy preciso/a, ya que equivocarse de varios milímetros puede añadir o quitar una talla. En caso de duda, elige la talla superior.